En busca del bienestar físico y mental

En busca del bienestar físico y mental

¿Cómo conseguir ese bienestar mental y físico que nos permita vivir la vida intensamente cada día y de forma plena? A menudo nos informamos acerca de nuevas formas de fomentar nuestra salud física y anímica; sin embargo, es mucha la información disponible, y tal vez no dispongamos de todo el tiempo para informarnos acerca de nuestro bienestar. Por ello, te presentamos a continuación todo lo que debes saber sobre el bienestar físico y mental

¿Qué es el bienestar?

Tradicionalmente se había considerado a la salud como ausencia de enfermedad. En 1.947 la OMS la definió como «un estado de completo bienestar físico, mental y emocional y no solo la ausencia de enfermedades».

¿Qué es el bienestar físico?

Cuando hablamos de bienestar físico no solo hablamos de estar fuertes y guapos. Lo más importante en este punto es conseguir tener a todo nuestro cuerpo (órganos, músculos, huesos, sentidos etc.) en perfecto estado para así hacer frente a nuestro día a día.

Para conseguir esto lo más importante van a ser el ejercicio y la alimentación:

  • Ejercicio: Es fundamental practicar actividad física diaria para conseguir todos sus beneficios; libera el estrés y la ansiedad, nos mantiene en forma, aumenta nuestra calidad de movimiento y con ello la calidad de vida, aumenta el flujo sanguíneo, libera hormonas de la felicidad, fortalece nuestros huesos etc.
    Por suerte cada vez somos más los que practicamos deporte y es nuestra obligación de transmitir estos valores a los demás.
  • Consumo de alimentos: El otro pilar fundamental es nuestra dieta. Llevar una dieta saludable que contenga todos los nutrientes esenciales es básico si queremos mantener un cuerpo sano. Además de ello, debemos evitar el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco ya que afectará de forma negativa a nuestro cuerpo. Si tu problema viene por un descontrol en la dieta te recomendamos acudir a un especialista en nutrición que te pueda asesorar correctamente ya que hoy en día todo el mundo da consejos y “No todo vale para todos”.

Todos los cambios que realices para conseguir tu bienestar físico deben ser progresivos. Lo importante es ser constante y coger unos buenos hábitos que puedas involucrar en tu día a día.

alimentación para el bienestar
¿Qué es el bienestar físico?

¿Qué es el bienestar mental?

Para conseguir el bienestar mental nuestro cerebro debe funcionar perfectamente y nosotros debemos tener la mente despejada para afrontar nuestros problemas del día a día de la mejor forma posible.

Para estimular nuestro cerebro debemos realizar actividades que estimulen nuestra mente como pueden ser:

  • Lectura, actividades artísticas o desarrollo de proyectos personales.

Si nosotros poseemos un cerebro desarrollado y además conseguimos un bienestar físico y emocional estoy seguro de que vamos a dar el 100% de nosotros.

bienestar mental
¿Qué es el bienestar mental?

¿Qué es el bienestar emocional?

Cuando hablamos de bienestar emocional hacemos referencia al estado de ánimo que viene influenciado por el sentirse bien con nosotros mismos y con lo que nos rodea.

En este punto juega un papel fundamental nuestra autoestima y la confianza en uno mismo. Cuando nosotros estamos felices con lo que hacemos, somos capaces de exteriorizarlo con alegría, buen humor y un estado emocional muy positivo.

Además de trabajar nuestro “yo”, para mejorar nuestro bienestar emocional es imprescindible rodearse de gente que nos aporte experiencias positivas y mejore nuestro estado de ánimo. Hoy en día existen muchas relaciones interpersonales, pero muchas de ellas son tóxicas y acaban por robarnos esa energía positiva que nosotros desprendemos.

Algunas de los consejos que os damos para conseguir el bienestar emocional son:

  • Rodéate de personas importantes para ti y que te hagan sentir bien.
  • Disfruta de tu tiempo libre y no lo cambies por cosas que no te apetecen hacer.
  • Afronta los problemas de forma positiva.
  • Practica un deporte que te divierta.
emociones y deporte
¿Qué es el bienestar emocional?

Importancia del equilibrio cuerpo y mente

¿Te ha pasado que cuando realizas abdominales te duelen otras partes del cuerpo como el cuello o la espalda? o, ¿que al hacer sentadillas sientes la tensión en las piernas y no en los glúteos que son los que se deberían estar fortaleciendo?

Si esto ocurre es porque hay una desconexión de la mente con el cuerpo. Es muy probable que cuando estés ejecutando estos ejercicios, tu mente no esté enfocada en lo que estás haciendo, sino en problemas del trabajo o situaciones ajenas al momento. Lo que pasa aquí, es que la ejecución motora no es acorde a la emisión neural, ocasionando no solo que el movimiento resulte ineficiente, sino también que desperdicies tu energía.

Cuando hacemos ejercicio, es importante enseñarle al cuerpo de forma consiente a conectarse con la mente para lograr un movimiento inteligente y eficiente. Se trata de aplicar la ciencia de la comunicación en el entrenamiento.

Somos una bella máquina que debe aprenderse a conducirse, con el fin de aprovechar mejor las energías y buscar la eficiencia mediante la conexión o comunicación asertiva corporal. Es un juego de mente-respiro-pienso-ejecuto-movimiento muscular. ¡Una unión de nuestras partes!

Importancia del equilibrio cuerpo y mente
Importancia del equilibrio cuerpo y mente

Para realizar lo anterior, es necesaria la concentración y reconocimiento de nuestro cuerpo o lenguaje corporal. Sin esto, sería como hablarle a una pared y el entrenamiento resultaría plano, sin propósito y sentido alguno. Cuando se logra esto, esa comunicación se traduce en el control mental de tu cuerpo.  

En el momento en que logras que el cuerpo le haga caso a tu mente en plena consciencia, creas un entendimiento de la corporalidad que se trae equilibrio. Esto traerá grandes beneficios a la hora de realizar funciones motoras básicas del día a día como subir escaleras sin que duelan las rodillas, sentarse activando el abdomen de manera adecuada para que la espalda no se vea afectada, o llegar al piso y volverse a levantar sin sentir que el cuerpo es más pesado de lo que se puede cargar. Además, te brindará mayor resistencia para completar las largas jornadas laborales.

Esto también será la fuente de bienestar mental y control ante la solución de problemas cotidianos porque el cuerpo aprende a trabajar en pro de lo que quieres, permitiéndote alcanzar objetivos en corto tiempo y con mayor satisfacción.

Nacimos para movernos. Si estuviéramos hechos solo para pensar, ir al trabajo, llegar a casa y hacer otros pequeños menesteres, tendríamos una gran cabeza y dos pies para realizar lo estrictamente necesario. Pero así no somos y lo negamos permitiendo que el sedentarismo predomine en nuestras vidas, o comportándonos de manera indiferente ante la mejor máquina biomecánica y bioquímica que nos ha sido dada. ¡ Y ni siquiera sabemos hablarle!

cuidar la mente y el cuerpo
Importancia del equilibrio cuerpo y mente

¿Por qué tendemos a perder nuestro centro y bienestar?

Somos poco conscientes de la implicación que tiene nuestro estado psíquico en nuestro bienestar corporal y también a la inversa, del efecto que nuestra fisiología ejerce sobre nuestra salud mental. Cuerpo y mente no son independientes sino que se necesitan inequívocamente el uno del otro. En general, no concebimos la estrecha relación ente ambos y damos poca importancia a la sinergia que mantienen.

Para nuestra expresión emocional utilizamos toda nuestra musculatura, un instinto innato y generalmente subconsciente – soltar una carcajada, fruncir el ceño, etc. No obstante, por general, esta tensión muscular expresiva es contraída e inhibida para limitar nuestra expresión, ya sea por miedos o prejuicios.

A largo plazo, esta restricción de nuestra expresión emocional física conlleva dolores crónicos que son consecuencia de un recogimiento personal y emocional total. El resultado: un individuo cerrado, tanto emocional como físicamente.

¿Por qué tendemos a perder nuestro centro y bienestar?

Vivimos en una sociedad que tiende a esconder la expresión de las emociones. ¿Por qué? Quién sabe. Nadie nos lo ha enseñado pero indirectamente lo hemos aprendido. “Llorar es de niños” o “rendirse es de débiles” son frases que se nos graban en nuestro subconsciente, llevándonos al miedo por expresar físicamente lo que sentimos. El precio a pagar, no obstante, es elevado.

A veces bloqueamos algunas zonas de nuestro cuerpo, aprendemos a inhibir ciertas respuestas, aislamos informaciones conflictivas que nuestros sentidos nos envían, cambiamos una determinada postura para no sentir el dolor físico. Costumbres adaptadas, un estado perezoso que nos han conllevado a la pérdida de espontaneidad, de nuestra capacidad de respuesta, de conexión con distintas áreas de nuestra memoria y con la flexibilidad para ciertos movimientos.

Esta comodidad termina causando estragos tanto en nuestra mente como en nuestro cuerpo. Mentalmente sufrimos una pérdida de nuestra identidad personal, en mayor o menor grado según nuestra historia. En cambio, físicamente podemos desarrollar un dolor crónico que deriva del mantenimiento de las tensiones musculares que generamos durante esa lucha por tratar de contraer nuestra musculatura. La consecuencia física altera todos los sistemas: des del hormonal y circulatorio hasta el sistema energético y, como no, el sistema nervioso.

bienestar mental y físico a través de la alimentación consciente
¿Por qué tendemos a perder nuestro centro y bienestar?

Equilibrando la mente y el cuerpo

Los ejercicios físicos, principalmente estiramientos, son importantes en el equilibrio cuerpo y mente. Descubriendo nuestro cuerpo, sus capacidades, su plena composición, adquirimos una consciencia plena que directamente trasladamos a nuestra mente.

Cuando nos encerramos en la restricción de la expresión muscular se producen procesos de acortamiento y contracción crónica de las cadenas musculares. Estos mecanismos, pero, no responden únicamente a procesos físicos, sino que se desarrollan y consolidan según nuestro proceso de adaptación y relación con el entorno, sumando las experiencias traumáticas que hemos podido acumular.

La forma del cuerpo, las posturas y la actitud corporal que vamos adquiriendo en el transcurso de los años nos permiten bloquear el flujo de información sensorial y nerviosa, disminuyendo su impacto en nuestro estado emocional y la expresión emocional de nuestro cuerpo y condicionando nuestra capacidad de respuesta, todo ello en un intento de adaptarnos a las demandas y represiones del entorno.

Equilibrando la mente y el cuerpo

Conseguir un bienestar pleno

Hay que tener en cuenta que cambiar de estilo de vida no es tarea fácil ni se consigue de la noche a la mañana. Para poder llegar a nuestros objetivos, primero de todo hay que ser consciente de la meta que queremos. Apuntarla en un papel nos ayudará a tenerla presente, por ejemplo.

Además, también es motivador implicar a terceros, es decir, contar a tu familia y amigos lo que quieres conseguir, ya que el reforzamiento social que ellos te pueden dar ayudará a persistir en la búsqueda de tus objetivos.

Aunque es necesario ser consciente, no hay que llegar al extremo, ni irracionalizar nuestros pensamientos. Es importante saber que lo que nosotros somos es producto de múltiples factores tanto genéticos como ambientales. Por eso, no hay que ponerse objetivos irrealistas ni buscar figuras atléticas que no podremos conseguir, simplemente porque cada uno tiene su constitución física. Cosa de la cual cada uno tiene que estar orgulloso y aceptar.

 Conseguir un bienestar pleno
Conseguir un bienestar pleno