¿Qué son los niños ferales o niños salvajes? Descubre casos reales de niños criados por animales

¿Qué son los niños ferales o niños salvajes… ¿Te imaginas cómo sería ser criado por lobos, monos, perros u otro tipo de animales? ¿Cómo sería crecer como ellos? Si lo que se te viene a la cabeza es alguna de esas películas de Disney, estás muy equivocado. Las historias reales de niños ferales o niños salvajes no se parecen en nada a los dibujos animados. Descubre en este artículo cómo es el desarrollo de los niños que han sido criados por animales y algunas historias y casos reales.

Los niños ferales
Los niños ferales

¿Qué son los niños ferales o niños salvajes?

Los “niños ferales” son aquellos niños que han crecido sin tener ningún contacto con humanos, aunque han podido convivir con otro tipo de animales (monos, lobos,…).

Los “niños salvajes” son aquellos niños que al igual que los “niños ferales” no han tenido ningún contacto con humanos pero no han sido criados por animales, sino que han permanecido en soledad y aislamiento.

Se conocen como “salvajes” porque cuando se les localiza y después de pasar tanto tiempo alejados del contacto social no parecen humanos, sino fieras.

Algunas características de los niños ferales. Problemas de desarrollo

Falta de habilidades sociales propias del ser humano.

Al crecer sin contacto humano ninguno no han tenido la estimulación social necesaria  y por tanto, muestran un comportamiento propio de animales.

Falta de lenguaje.

Como todos sabemos, para relacionarnos el lenguaje es fundamental.  En los niños ferales, uno de los mayores impedimentos para adaptarse es que son incapaces de comunicarse.

¿Por qué? Sin el factor social es imposible que se aprenda el lenguaje y si el lenguaje no se produce de manera temprana (0-3 años) es difícil de producirse.

Sentidos muy desarrollados.

Audición, visión nocturna y olfato muy bien desarrollado, olfatean todo lo que encuentran a su paso. En cuanto al gusto, se adaptan a la alimentación de los animales con los que conviven (por ejemplo, carne cruda). En lo referente al tacto, no tienen sensibilidad al frío, lluvia o calor.

Capacidad para imitar y repetir las conductas de los animales con los que han convivido.

Por ejemplo, los niños que han convivido con lobos tienden a aullar, a comer carne cruda,… Es por esto también que no son capaces de caminar erguidos. Suelen caminar como animales y poseen una habilidad increíble para correr de modo muy veloz.

¿Por qué les pasa esto a los «niños ferales o a los niños salvajes»?

Estos fenómenos ocurren en los niños durante su desarrollo y coincide con lo que se conoce como “períodos críticos”.

Los períodos críticos son los momentos en los que el sistema nervioso es más susceptible de aprendizaje y van desde los dos años hasta la pubertad. Si en este momento no se produce la estimulación ambiental adecuada es complicado que la conducta se aprenda. Las funciones intelectuales, las conductas sociales y la personalidad son las más perjudicadas por la deprivación ambiental.

períodos críticos en los niños ferales o niños salvajes
Períodos críticos en los niños ferales o niños salvajes

Según Itard: “Nuestra especie es especial porque sus miembros se necesitan entre ellos”. Si el niño permanece aislado o privado de estimulación, las funciones del cerebro y su desarrollo se debilitan y puede ocurrir:

  1. Que el cerebro no crezca y por tanto el cuerpo se quede atrofiado. Se produce falta de materia en el cerebro.
  2. Esto afecta al modo en que procesan la información como cuando escuchan gente hablando o ven diferentes cosas en movimiento.
  3. No son capaces de actuar como deberían ante las demandas del ambiente.
  4. Una vez que son conscientes de que no responden como deberían hacerlo, se pueden poner agresivos o por el contrario, enmudecer.
  5. Todas estas circunstancias les provocan sentimientos negativos y problemas comportamentales y emocionales.

Casos reales de niños ferales y salvajes

A lo largo de la historia se han descrito muchos casos de niños ferales, tanto reales como inventados.

Sí, ya sé que todo esto parece increíble, por eso os voy a mostrar de modo muy resumido algunos casos que por más inverosímiles que parezcan, han ocurrido en la vida real.

Historia de Víctor de Aveyron el pequeño salvaje

Adolescente salvaje francés descubierto cerca de los Pirineos por tres cazadores. El doctor Itard se encargó de estudiar su evolución y comportamiento. A pesar de que se trabajó con él intensamente no se lograron grandes avances y no se consiguió que tuviera un comportamiento más o menos civilizado. Murió con alrededor de 40 años.

Historia de Amala y Kamala, «las niñas lobo»

Se las conoce por ser dos niñas (no hermanas, ya que se dice que fueron acogidas en momentos distintos) criadas por una manada de lobos en India alrededor de 1920. Cuando se las descubrió, su comportamiento era semejante al de los lobos, aullaban, tenían muy desarrollados los sentidos, tenían dificultades para caminar erguidas y no eran capaces de hablar. Se observó que incluso se quitaban la ropa a bocados.

Historia de Genie la niña salvaje

El caso de Genie es el de una “niña salvaje” no criada por animales sino que pasó su infancia en aislamiento en unas condiciones pésimas y maltratada por su padre. Cuando la encontraron, se descubrió que caminaba con muchas dificultades, tenía un vocabulario de alrededor de unas 20 palabras y se comportaba como un animal (escupía, arañaba,…).

¿Es posible la rehabilitación de los niños ferales o de los niños salvajes?

Los retos de la rehabilitación de los niños ferales o niños salvajes son muy grandes. Se intenta reinsertarlos en la sociedad pero es complicado que aprendan a hablar y a relacionarse de forma totalmente «civilizada».

De todo esto se obtiene como conclusión, que somos lo que vivimos y estamos formados por las situaciones que forman parte de nuestra vida.

Relacionarse con otras personas en los primeros años de vida es imprescindible para aprender todas las capacidades que nuestro entorno nos demanda para sobrevivir.

He aquí la importancia de vivir en sociedad y de la cultura para formarnos como personas.  Somos humanos porque vivimos en sociedad.

O como dijo Aristóteles: “El ser humano es un ser social por naturaleza y el insocial por naturaleza y no por azar o es mal humano o más que humano… La sociedad es por naturaleza y anterior al individuo… el que no puede vivir en sociedad o no necesita nada por su propia suficiencia, no es miembro de la sociedad, sino una bestia o un dios”.

Si os ha parecido interesante, aquí os dejo algunas películas para que saquéis vuestras propias conclusiones:

  • Tarzán
  • El libro de la Selva
  • Entre lobos (2010)
  • El pequeño salvaje
  • Mamá (2012)