
Estudio: la apnea del sueño puede causar daños en las áreas del cerebro vinculadas con la memoria
Un nuevo estudio publicado en la revista Neurology ha descubierto que la apnea obstructiva del sueño, un trastorno común del sueño que reduce los niveles de oxígeno durante el descanso, está asociada con daños en regiones del cerebro cruciales para la memoria. La investigación muestra que una menor saturación de oxígeno durante el sueño con movimientos oculares rápidos (REM) se correlaciona con cambios estructurales en el cerebro, especialmente en áreas como el hipocampo y la corteza entorrinal, ambas esenciales para almacenar y recuperar recuerdos. Estos cambios también están relacionados con un peor rendimiento de la memoria, lo que proporciona nuevos datos sobre cómo los trastornos del sueño pueden contribuir al deterioro cognitivo relacionado con la edad e incluso a la enfermedad de Alzheimer.

Cómo el estudio relacionó la apnea del sueño con cambios cerebrales relacionados con la memoria
Según Neuroscience News, el estudio fue dirigido por el neurocientífico Bryce A. Mander, doctor por la Universidad de California, Irvine, en colaboración con colegas del Centro de Neurobiología del Aprendizaje y la Memoria de la UCI. La investigación fue publicada en línea el 7 de mayo de 2025 en Neurology (https://doi.org/10.1212/WNL.0000000000213639), la revista médica de la Academia Americana de Neurología, una de las revistas más prestigiosas en el campo de la salud cerebral.
El estudio incluyó a 37 adultos mayores (edad promedio 73 años) sin deterioro cognitivo diagnosticado y que no tomaban medicamentos para dormir. De ellos, 24 participantes tenían apnea obstructiva del sueño (AOS), mientras que el resto sirvió como sujetos de control.
Los investigadores realizaron estudios del sueño durante toda la noche a todos los participantes para controlar los niveles de oxígeno durante todas las fases del sueño, centrándose especialmente en la fase REM, conocida por su papel en la consolidación de la memoria y el procesamiento emocional.
Los participantes también se sometieron a imágenes cerebrales de alta resolución (resonancia magnética) para detectar cambios estructurales en el cerebro y realizaron pruebas de memoria antes y después del sueño para evaluar cómo se formaba o retenía la memoria durante la noche, un concepto conocido como memoria dependiente del sueño.
¿Qué diferencia a este estudio?
Investigaciones anteriores ya habían demostrado que la apnea obstructiva del sueño puede afectar la función cognitiva, pero los mecanismos detrás de esta relación no estaban del todo claros. Este estudio aporta innovaciones clave:
- Se centra específicamente en la fase REM del sueño, no en el sueño en general.
- Mide las hiperintensidades de la sustancia blanca — marcadores específicos de daño en pequeños vasos sanguíneos — como indicador biológico del deterioro.
- Incluye imágenes detalladas de regiones del cerebro relacionadas con la memoria, como el hipocampo y la corteza entorrinal.
- Utiliza pruebas de memoria dependientes del sueño, lo que permite vincular cambios estructurales en el cerebro con el rendimiento cognitivo.
A diferencia de estudios anteriores que medían la calidad general del sueño o los niveles totales de oxígeno, esta investigación destaca el papel fundamental que desempeña la saturación de oxígeno durante fases específicas del sueño, especialmente la fase REM, en la salud cerebral.
Principales conclusiones del estudio
1. El bajo nivel de oxígeno durante el sueño REM daña los pequeños vasos sanguíneos del cerebro
Los participantes con niveles más bajos de oxígeno durante el sueño REM presentaban niveles más altos de hiperintensidades de la sustancia blanca, que aparecen como puntos brillantes en los escáneres cerebrales. Estos son signos de daño en los vasos sanguíneos pequeños, que pueden progresar silenciosamente sin síntomas durante años.
Ejemplo: Imaginemos una persona de 73 años que ronca fuerte y se siente cansada durante el día. Este estudio sugiere que, si su sueño REM se ve interrumpido con frecuencia por descensos en los niveles de oxígeno, su cerebro podría estar acumulando lentamente daño microvascular.
2. Los centros de memoria del cerebro muestran signos de atrofia
El estudio descubrió que este daño en los vasos sanguíneos estaba asociado con la reducción del hipocampo y el adelgazamiento de la corteza entorrinal, dos áreas del cerebro esenciales para formar y recordar recuerdos.
Ejemplo: Una persona con apnea del sueño no tratada podría experimentar olvidos leves o problemas para recordar nombres, síntomas que a menudo se descartan como parte del envejecimiento normal, pero que en realidad podrían ser signos tempranos de atrofia cerebral.
3. Peor rendimiento de la memoria después del sueño
Los participantes que presentaban más alteraciones cerebrales también obtuvieron peores resultados en las pruebas de memoria realizadas después de dormir, lo que sugiere una relación directa entre los cambios estructurales en el cerebro y el funcionamiento cognitivo en la vida diaria.
Ejemplo: Una persona jubilada podría notar que olvida detalles de una conversación del día anterior o que pierde objetos con más frecuencia. El estudio indica que estos problemas podrían estar relacionados con una mala calidad del sueño REM provocada por la apnea.
4. El grado de daño cerebral se correlaciona con la gravedad de las caídas de oxígeno
Los investigadores descubrieron que no solo importaban los niveles mínimos de oxígeno en sangre, sino que también el tiempo total que se pasaba con niveles de oxígeno por debajo del 90 % durante el sueño predecía la cantidad de daño cerebral observado.
Ejemplo: Las personas que pasan incluso períodos cortos durante la noche con niveles de oxígeno por debajo del rango saludable pueden tener un mayor riesgo de deterioro cognitivo, incluso si se sienten bien durante el día.
5. Es probable que el daño se acumule con el tiempo
El estudio se centró en adultos mayores sin diagnóstico de demencia, lo que sugiere que estos cambios comienzan antes de que aparezcan los síntomas clínicos. Esto se suma a la evidencia de que la detección y el tratamiento tempranos de la AOS pueden ser clave para prevenir el deterioro futuro.
Ejemplo: Un adulto mayor recién diagnosticado con apnea del sueño puede beneficiarse no solo de sentirse más descansado, sino también de proteger la salud cerebral a largo plazo al comenzar el tratamiento temprano.
Cómo la apnea del sueño puede afectar la memoria y el aprendizaje con el tiempo
El estudio proporciona pruebas biológicas sólidas de que la apnea obstructiva del sueño no solo afecta a la calidad del sueño, sino también a la capacidad del cerebro para procesar y almacenar información. La fase más afectada es la del sueño REM, que desempeña un papel fundamental en la consolidación de nuevos recuerdos, el procesamiento de las emociones y la integración de las experiencias de aprendizaje del día.
Los investigadores descubrieron que los niveles más bajos de oxígeno durante el sueño REM estaban relacionados con cambios estructurales en dos regiones del cerebro — el hipocampo y la corteza entorrinal — que son esenciales para formar, almacenar y recuperar recuerdos. Cuando estas áreas se dañan, el cerebro se vuelve menos eficiente en el manejo de las funciones de la memoria a corto y largo plazo.
Además, el estudio descubrió que el daño en estas áreas relacionadas con la memoria estaba directamente relacionado con un peor rendimiento de la memoria dependiente del sueño. Eso significa que el cerebro era menos capaz de retener la información aprendida antes de dormir y tenía más dificultades para recordarla al día siguiente, un proceso que normalmente favorece el sueño REM saludable.
Estos hallazgos sugieren que las capacidades cognitivas, como la memoria, el aprendizaje, la resolución de problemas e incluso la regulación emocional, pueden verse gradualmente debilitadas en personas con apnea del sueño no tratada. Aunque estas deficiencias pueden parecer sutiles al principio, con el tiempo podrían contribuir a un deterioro cognitivo notable y posiblemente aumentar el riesgo de padecer trastornos como el deterioro cognitivo leve o la enfermedad de Alzheimer.
Por qué estos hallazgos son importantes para la salud cerebral y la vida cotidiana
Esta investigación destaca cómo un trastorno del sueño común y a menudo pasado por alto puede tener consecuencias directas en la estructura cerebral y la memoria. Al demostrar que los niveles más bajos de oxígeno durante el sueño REM están relacionados con daños en regiones clave de la memoria, el estudio ayuda a explicar por qué algunas personas con apnea del sueño experimentan problemas cognitivos con el paso del tiempo.
Desde una perspectiva científica, los hallazgos aclaran cómo la alteración del sueño puede provocar cambios físicos en el cerebro. Investigaciones anteriores habían apuntado a una conexión entre la apnea del sueño y el deterioro de la memoria, pero este estudio proporciona pruebas visuales y cuantificables de los cambios en el hipocampo y la corteza entorrinal, áreas esenciales para el aprendizaje y la memoria.
Para los profesionales sanitarios, el estudio refuerza la idea de que se deben tener en cuenta los trastornos del sueño cuando los pacientes presentan olvidos o dificultades para concentrarse. Los cambios estructurales observados en los escáneres cerebrales pueden comenzar mucho antes de que aparezcan síntomas evidentes, lo que hace que la identificación y el tratamiento tempranos de la apnea del sueño sean aún más importantes.
A nivel personal, los resultados nos recuerdan que dormir bien no solo significa sentirse descansado, sino también proteger el funcionamiento cerebral a largo plazo. Muchas personas pueden no darse cuenta de que las alteraciones respiratorias nocturnas pueden afectar gradualmente su capacidad para recordar, aprender cosas nuevas o mantener la agudeza mental con la edad.
Resumiendo, el estudio destaca cómo la salud del sueño y la salud cerebral están estrechamente relacionadas. Controlar afecciones como la apnea obstructiva del sueño puede ser una de las formas prácticas de cuidar la memoria y la claridad mental a medida que envejecemos.
Conclusión
El estudio proporciona pruebas claras de que la apnea del sueño, especialmente cuando afecta a los niveles de oxígeno durante la fase REM, puede contribuir a cambios cuantificables en las regiones del cerebro responsables de la memoria. Aunque la investigación no establece una relación directa de causa y efecto, las asociaciones entre la reducción de la saturación de oxígeno, el daño en los vasos sanguíneos pequeños y la atrofia cerebral relacionada con la memoria son consistentes y están bien documentadas.
Estos hallazgos refuerzan la importancia de reconocer y tratar la apnea del sueño, no solo para el bienestar general, sino también como parte de una estrategia más amplia para apoyar la salud cognitiva con la edad. Abordar los problemas respiratorios relacionados con el sueño en una fase temprana puede ayudar a reducir el riesgo de deterioro de la memoria y cambios estructurales en el cerebro con el paso del tiempo.
Comprender la relación entre la calidad del sueño y la estructura del cerebro destaca el papel del sueño en el mantenimiento de la memoria, la capacidad de aprendizaje y la claridad mental, todos ellos aspectos esenciales para un envejecimiento saludable.